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Feller Rate baja clasificación crediticia de Ripley en medio del impacto por la caída del consumo en el retail

La agencia de calificación de riesgos Feller Rate ha reducido las calificaciones de solvencia y bonos de Ripley Chile S.A., al mismo tiempo que ha conservado las perspectivas en "Negativas". Este ajuste también se aplica a Ripley Corp S.A.

Feller Rate baja clasificación crediticia de Ripley en medio del impacto por la caída del consumo en el retail
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Las tensiones en el sector de tiendas por departamento han tenido un impacto significativo en la evaluación de solvencia y las líneas de bonos de Ripley Chile S.A. En consecuencia, las perspectivas se han mantenido en "Negativas".

La agencia de calificación de riesgos Feller Rate ha reducido las calificaciones de solvencia y bonos de Ripley Chile S.A., al mismo tiempo que ha conservado las perspectivas en "Negativas". Este ajuste también se aplica a Ripley Corp S.A.

En detalle, las calificaciones han pasado de "A+" a "A" debido al "deterioro de su posición financiera en comparación con sus niveles históricos, que ha cambiado de 'Satisfactoria' a 'Intermedia'".

Según explicó la agencia, la decisión se basó en las presiones derivadas del sector de tiendas por departamento y la disminución del consumo en dicho sector, donde las expectativas de recuperación han retrocedido, además de unos "niveles de inflación persistentemente elevados".

Adicionalmente, señalan que el negocio bancario de la empresa (Banco Ripley) no ha distribuido dividendos durante el presente año, lo que ha generado presiones en su posición financiera. Estas presiones no han podido ser compensadas con los resultados positivos de su segmento de renta comercial ni con el bajo nivel de endeudamiento a nivel corporativo.

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A pesar de lo anterior, la agencia Feller destaca que Ripley ha implementado diversas medidas para potenciar la eficiencia en su gestión y fortalecer sus operaciones. Estas iniciativas incluyen la incorporación de nuevos activos de renta, mejoras en el sector minorista, y la venta de activos, entre otros aspectos.

Según el análisis de la agencia de calificación, en el tercer trimestre la compañía generó ingresos por $634.979 millones, excluyendo su sector bancario, lo que representó una disminución del 15,2% en comparación con el mismo período del año anterior.

Por otra parte, el Ebitda ajustado mostró un déficit de $69.767 millones, o -$7.551 millones en los últimos doce meses, debido a "presiones en costos y mayores actividades promocionales enfocadas en reducir los niveles de inventarios, entre otros factores".